Ahora que ya conocemos las normas que regulan las características fisicoquímicas del agua y su tratamiento adecuado, es importante entender cómo funcionan los sistemas de tratamiento de aguas residuales. Estos sistemas nos dan las herramientas necesarias para cumplir con la normativa y alcanzar los objetivos de calidad.
Comencemos con algunos conceptos clave que relacionan las normas de calidad del agua con los procesos dentro de una PTAR:
- PTAR significa Planta de Tratamiento de Aguas Residuales. Su función es eliminar o reducir al máximo los contaminantes presentes en el agua usada.
- Toda fuente que genere aguas residuales debe contar con una PTAR. Además, debe garantizar su mantenimiento y operación adecuados.
- Los emisores de agua tratada, dependiendo del tipo y cantidad de residuos, deben presentar análisis de calidad realizados por laboratorios certificados.
- La medición de parámetros permite identificar y cuantificar los componentes del agua residual, tanto los perjudiciales como los inocuos. Así es posible controlar y mejorar el proceso.
¿Qué es el agua residual?
El agua residual es el resultado del uso del agua en actividades domésticas o industriales. Todos los residuos que se incorporan al agua deben ser retirados antes de devolverla a fuentes naturales como ríos o mares.
Los procesos principales para tratar el agua residual son los siguientes:
1. Cribado
Se retiran los sólidos más grandes como plásticos, papeles y otros residuos visibles. Esto se hace usando rejillas o cribas de materiales resistentes, como el acero inoxidable.
2. Ecualización
En esta etapa se estabiliza el pH del agua antes del tratamiento biológico. Un pH neutro es clave para que las bacterias que degradan la materia orgánica puedan trabajar correctamente. Se usan productos químicos específicos para esta neutralización.
3. Tratamiento biológico
Aquí se inyecta oxígeno al agua para transformar la materia orgánica en lodos. Esta es una de las fases más importantes. Se reducen la DBO (Demanda Biológica de Oxígeno) y la DQO (Demanda Química de Oxígeno). También se forman lodos que ayudan a aglutinar partículas contaminantes. Para esta etapa se usan equipos de aireación que deben estar bien dimensionados según el proceso.
4. Sedimentación y clarificación
El agua pasa por un sedimentador donde se separan los lodos del agua clara. Los lodos pueden recircularse o deshidratarse, según su calidad y volumen. Esta etapa depende directamente de la efectividad del tratamiento biológico anterior.
5. Desinfección
Se eliminan microorganismos nocivos como virus y bacterias. Esto se logra comúnmente añadiendo cloro, aunque también existen otros métodos como la luz ultravioleta o el ozono.
Tratamientos complementarios
Según el tipo de agua, se pueden añadir otros procesos como:
- Tratamiento fisicoquímico
- Separación mecánica
- Sedimentación forzada
- Desinfección con luz UV u ozono
Todos estos tienen el mismo fin: lograr la mejor calidad de agua posible.
Subproductos del tratamiento
Al finalizar el proceso, se obtienen tres subproductos principales:
- Agua limpia
- Lodos
- Energía en forma de gases
La calidad de estos subproductos es un reflejo de qué tan eficiente es el tratamiento. Por ejemplo, si hay malos olores en la planta, significa que los gases generados no son de buena calidad. En estos casos, se deben hacer ajustes al proceso basados en mediciones reales y verificables.
Conocer el funcionamiento de una PTAR es clave para su buena administración. Contar con este conocimiento técnico permite ahorrar tiempo y dinero al momento de contratar servicios o adquirir equipos.
Nuestro objetivo es brindar las herramientas necesarias para que la gestión de estos sistemas sea efectiva, eficiente y con resultados visibles a corto plazo.
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